«La revalorización de la dehesa de Vitigudino será un hecho sin precedentes«, ha dicho en Las Arribes al Día el alcalde de Vitigudino, Germán Vicente, en una entusiasmada presentación del «acuerdo de colaboración» entre Berkeley y el Ayuntamiento de Vitigudino que ha llegado, conviene recordar a los lectores, en plena polémica por la construcción de una gran balsa en el encinar con protección medioambiental de Retortillo, dentro de las obras de la controvertida mina de uranio. “Una balsa de 36.000 metros cúbicos en pleno paraje natural“, destacó el redactor de La Sexta Noticias, Miguel Vega, en el directo que protagonizó el programa ‘Más vale tarde‘ desde la localidad. La tala de encinas ha encendido con virulencia la indignación entre los vecinos contrarios al proyecto que han logrado un espectacular apoyo mediático de televisiones y periódicos de todo el país que estuvo muy presente durante el pasado mes de marzo y sigue sin perder vigencia en la actualidad, un fuego que también está siendo avivado por altos representantes de la esfera política. Al mismo tiempo, Berkeley también se está esforzando mucho para hacer llegar a la zona los mensajes que quiere difundir, vinculados con las repercusiones positivas, que según la empresa, tendrá la mina para el territorio, como, por ejemplo, la creación de 400 puestos de trabajo, «aunque en 2011 decía que eran 150-200«.
De este modo, las charlas y concentraciones contra la mina, que ha venido impulsando con férrea obstinación la Plataforma Stop Uranio, aunque con un tímido respaldo de afluencia, se han visto fortalecidas por estos vientos de cola que también deben de haber sorprendido al alcalde de Villavieja de Yeltes, Jorge Rodríguez, que, ante las cámaras de La Sexta volvió a denunciar que les “pintaron” un proyecto en el que la actividad, “casi exclusiva”, era “extractiva“. “Nosotros no contábamos con un almacenamiento de residuos definitivo y mucho menos con las características que más tarde puso de relieve el Consejo de Seguridad Nuclear“, señaló el regidor, antes de desvelar que les hablaron de un “almacenamiento de escombros y ripios, cuando en realidad eran materiales radioactivos“. Además, negó que les precisaran la “calidad industrial“, su “capacidad contaminante“, ni la cantidad de los vertidos que irían al río Yeltes, algo que, subrayó, tampoco se menciona en el proyecto.
Las voces críticas con el proyecto también vienen desde las filas populares, ya que hay alcaldes y ediles del PP que no se sienten, digamos, tranquilos con el proyecto. Algunos prefieren guardarse las quejas para la intimidad, ese off the record que, en ocasiones, parece llevar envoltorio de caramelo envenenado…. Pero también los hay con un ‘no’ bien grande, como algunos de los que forman la Mancomunidad ‘Yeltes’, y eso que estamos hablando de un grupo de regidores que se han venido significando hasta ahora por una inamovible querencia a posicionarse frente al alcalde de Villavieja.
Y también hay vecinos y autoridades políticas que defienden el proyecto de la mina, es importante dejarlo claro también, al considerar que es una iniciativa que se traducirá en desarrollo económico y creación de empleo en una zona especialmente castigada con motivo de la sangría despoblacional, envejecimiento y la falta de iniciativas económicas de relevancia, entre otras carencias.
Realmente, la mina de uranio está poniendo el mundo al revés en la comarca. Al regidor de Villavieja, del PSOE, no le gusta. Pero le pone mucho al alcalde de Vitigudino, que se presentó también con las siglas socialistas presidiendo el programa electoral, como se puede interpretar al leer sus declaraciones en las que habla de la «revalorización» de la dehesa de Vitigudino por Berkeley como un «hecho sin precedentes» a la altura, parece decir, del acontecimiento histórico planetario que inmortalizó la exdirigente socialista Leire Pajín en su célebre repertorio de frases para no olvidar.
Total, que la charla informativa sobre la mina de uranio que tendrá lugar en Peralejos de Abajo este viernes 14 de abril a las 13:00 horas se presenta movidita. El cartel me lo acaba de hacer llegar Alfonso Castilla, el alcalde del municipio y presidente de la Mancomunidad de Vitigudino, entidad supramunicipal que congrega a una veintena de localidades de la comarca.
El portavoz del Grupo Municipal de Ciudadanos, Antolín Alonso, aseguró ayer a Salamanca News que la oposición, «igual que los vecinos», están «alucinando» con el acuerdo de colaboración que Germán Vicente ha anunciado, ya que el regidor, según señaló, no les ha comunicado hasta ahora ninguna información al respecto, ni de forma oficial ni informal. Alonso añade además que el alcalde «no es quién para determinar nada de un bien común», ya que es una medida que tiene que aprobarse, en su caso, en el pleno. Por último, hizo también responsables de las políticas que está liderando el alcalde de Vitigudino al resto de los concejales socialistas del equipo de Gobierno.